Autoridades del estado de Maryland sentenciaron a 10 años de prisión a Thomas Byron Stemen por haber inyectado con una jeringa su propio semen a una mujer dentro de un supermercado.
Según el relato, este sujeto caminaba detrás de la víctima cuando ella entró al establecimiento, posteriormente al intentar tomar el 'carrito', el hombre se acercó y simuló chocar con la mujer, momento en el que inyectó la jeringa en los glúteos de la señora.
Tras el piquete, la mujer le preguntó al hombre si había apagado un cigarro en su cuerpo, a lo que él respondió afirmativamente, incluso bromeó señalando que se había sentido como la picadura de una abeja.
Todo este hecho quedó captado en video por las cámaras de vigilancia del supermercado, las cuales sirvieron como pruebas para encarcelar al hombre que realizó dicha atrocidad, además los fiscales dictaminaron está acción como 'extraña' y 'escalofriante'.
La víctima debió someterse a exámenes médicos para determinar si había sido contagiada de una enfermedad de transmisión sexuales.
Tras las investigaciones correspondientes, se encontró que Stemen ya había atacado a mujeres en ocasiones anteriores, pues desde 1986 tiene contabilizado al menos 6 condenas por ataques a personas del sexo femenino, incuso menores de edad.