Sobrevivió al COVID y un médico borracho lo atropelló y mató
Liliana Guerra, mamá de Ronald Lezcano Guerra, un joven trabajador de la pesca que murió atropellado por un auto que conducía un médico en estado de ebriedad, levantó la voz ante su lamentable pérdida: "sobrevivió al Covid y me lo mató un borracho”.
El hecho ocurrió la madrugada del lunes en la ruta que conduce al puerto de Rawson, en Argentina, donde Guerra, de 24 años, trabajaba en el sector pesquero.
El hecho ha conmovido a la comunidad del Valle. El joven fallecido había padecido Coronavirus y una vez respuestó se presentó como voluntario al plan Detectar. “Además él quería ser enfermero y después, si podía, seguir la carrera de medicina. Era un chico trabajador que se crió conmigo. Los dos solos. Ahora no lo tengo por culpa de alguien que manejaba borracho”, agregó la madre, desconsolada, en declaraciones a la prensa en la Fiscalía de Rawson.
Ronald se dirigía a su trabajo en el Puerto de Rawson alrededor de las 2.30 del lunes en su bicicleta cuando fue atropellado desde atrás por el auto que manejaba el médico Nicolás Sigonuma, de 26 años.
El joven Guerra sufrió lesiones gravísimas y murió poco después del accidente. Las pericias confirmaron que el médico estaba borracho con 1,22 gramos de alcohol en sangre y además conducía a una velocidad cercana a los 100 kilómetros por hora, mucho más alta que la permitida en la zona donde se produjo el accidente.
El médico fue noticia varias veces en los medios locales. La primera de ellas fue cuando, en noviembre, logró recibirse de médico pese a las dificultados generadas por la pandemia completando sus estudios vía Zoom.
Pero pocos días después sorprendió con un tuit de su cuenta personal titulado “Uno menos”. Se refería al fallecimiento por Covid 19 del dirigente del Partido Socialista Auténtico Anselmo Montes, un político muy respetado y apreciado en la comunidad chubutense. Causó un repudio generalizado.
En las últimas horas salieron otras publicaciones del médico en sus redes sociales de tono xenófobo y en algunos casos reivindicando a la dictadura militar.
Además de calificar en primera instancia al hecho como “homicidio culposo” dijo en su informe que “el ciclista y el automovilista se conducían en el mismo sentido. El ciclista se conduce por la ruta y no por la bicisenda que existe en el lugar, sin ropa refractaria, con auriculares de su celular colocados sin luces ni 'ojos de gato' en su bicicleta".