Murió en situación de calle, sin saber que tenía una herencia de 600 mdd
La impactante historia de Catherine Boone ha dado la vuelta al mundo. Esta relata, la vida de excesos y la situación precaria en la que vivía, sin saber que en realidad poseía una fortuna de 900 mil dólares, lo equivalente a 18 millones de pesos mexicanos.
La mujer de, 49 años de edad, falleció como indigente, debido a una serie de enfermedades mentales y el abuso de sustancias tóxicas, según su padre, quien también afirmó que ella desconocía que tenía un millonario fondo sin reclamar.
Trascendió que Catherine vivió con su madre hasta el 2016, sin embargo, al morir su madre, recayó en las drogas y el alcohol, hasta quedar en situación de calle. Lo insólito, fue que el abogado de su primogénita, intentó contactarla a través de anuncios en diferentes medios, para notificarle la millonaria herencia que de la que era dueña, aunque el profesional no tuvo éxito en su búsqueda.
Aunque también se intentó contactar a los hijos, el profesional no tuvo éxito, por lo que en 2019 la justicia local decidió enviar dicho monto al Departamento de Tierras de Oregon, cuyo fin es gestionar dinero que no ha sido reclamado o que simplemente los herederos no querían recibir, según informó el canal KGW News.
''Amigos y conocidos dijeron que no tenían idea de que Boone tuviera dinero disponible para ella. Luchó por sobrevivir, como muchos otros que vivían sin refugio en un duro entorno exterior'', señaló KGW News.
Sus padres eran divorciados
Según la información, los padres de Catherine eran divorciados. Su padre se volvió a casar, pero pese a las dificultades intentaron mantenerse en contacto.
“Lo atribuyo casi todo a las drogas, pero creo que ella también tenía algunos problemas de salud mental y la combinación de los dos no le funcionó muy bien”, dijo Jack Spithill, padre de la fallecida.
Por varios años la mujer fue voluntaria en una organización sin fines de lucro en la ciudad donde vivió con su madre, antes de recaer en las drogas. “Cuando no tenía ninguna conexión con familiares o amigos, y estaba consumiendo drogas, entonces creo que era un alma verdaderamente perdida”, dijo Spithill
Su padre afirmó sentirse responsable de la muerte de su hija, por no entender lo que significa realmente que algo afecte la salud mental. “Me di por vencido con ella debido a las drogas y no debería haber hecho eso”, dijo entre lágrimas Spithill.
Boone falleció en enero de 2020, debido a graves problemas respiratorios y pese a los esfuerzos del personal médico, la mujer terminó falleciendo en el hospital local.
Por su parte, el Departamento de Tierras del estado de Oregon decidió entregar el dinero al representante legal de Catherine, para ponerse en contacto con todos los posibles herederos, incluyendo a los dos hijos de Boone.