La UEFA, órgano rector del fútbol europeo, se opone a que España y Portugal conformen con Marruecos un grupo de tres confederaciones para buscar la sede de la Copa del Mundo 2030. El presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, quien previamente elogió los planes de un Mundial en las Islas Británicas, dijo el lunes que no respaldaría que una nación de otro continente sea involucrada en una propuesta europea.
“No estoy a favor de ofertas interconfederaciones”, señaló Ceferin. Ceferin manifestó su enfado de que los políticos hayan estado involucrados en el anuncio de los planes. El primer ministro español planteó la posibilidad de una candidatura conjunta con Portugal y Marruecos, mientras que una cumbre política fue usada por líderes de Bulgaria, Grecia, Rumania y Serbia para declarar sus intenciones de presentar una propuesta colectiva. “Alguien debería decirles a los políticos que no depende de ellos hablar de si ellos serán o no los anfitriones de la Eurocopa o la Copa del Mundo”, indicó Ceferin.
“He escuchado a muchos políticos decir que seremos candidatos de esto o lo otro... para eventos deportivos, ellos deberían hablar con sus asociaciones nacionales”. La Asociación Inglesa de Fútbol encabeza un estudio de viabilidad para una candidatura que incluiría a Escocia, Gales, Irlanda del Norte e Irlanda. En Inglaterra de antemano están programados siete partidos, entre ellos las semifinales y la final, para la Eurocopa de 2020, y el lunes fue el país confirmado como sede de la Eurocopa de mujeres para 2021. “Haré todo lo que pueda para tener sólo una propuesta europea para el Mundial”, afirmó Celerin, “pues eso aumenta enormemente las posibilidades de que Europa sea sede de la Copa del Mundo”.
Sudamérica busca celebrar el centenario de la Copa del Mundo en 2030, y de antemano se ha anunciado una candidatura conjunta de Argentina, Paraguay y Uruguay. Pero en un revés al plan, la CONMEBOL se ha visto obligada a cambiar de sede en dos ocasiones para el partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors. El duelo, que originalmente se realizaría en Buenos Aires, se jugaría en Madrid tras los disturbios registrados en la capital argentina contra jugadores del Boca, club visitante.