Aaron Rodgers quiere regresar a la élite en la NFL
Cuando el pasado 15 de octubre Aaron Rodgers se quedó tendido en el campo del US Bank Stadium de Minnesota, tras recibir un golpazo del linebacker Anthony Barr de los Vikings, algunos pensaron lo peor, quizás la lesión que cambiaría su carrera para siempre o hasta la posible debacle del MVP del Super Bowl XLV.
Han pasado 317 días de aquella terrible imagen donde el #12 se fracturó la clavícula, pero Rodgers no necesitó tanto tiempo para reaparecer. Apenas le tomó dos meses regresar a los emparrillados, pues el domingo 17 de diciembre de 2017 jugó en la derrota 24-31 en Carolina de la Semana 15.
Hasta antes de ese impacto violento, los Green Bay Packers marchaban líderes de la NFC Norte con récord de 4-1, pero sin su quarterback estrella las cosas cambiaron drásticamente y los Minnesota Vikings se apoderaron de la división terminando en la cima con marca de 13-3 contra un infame 7-9 de Green Bay con Brett Hundley en los controles.
Los Empacadores no son lo mismo sin el mariscal de campo californiano detrás del centro. Rodgers ha forjado una carrera digna de Salón de la Fama con dos temporadas (2011, 2014) siendo el Jugador Más Valioso de la liga, seis selecciones al Pro Bowl, dos veces primer equipo All-Pro y por supuesto tras haber levantado el Trofeo Vince Lombardi al culminar la campaña de 2010.
Las estadísticas de Aaron Rodgers son dignas de uno de los mejores quarterbacks de la historia pues en 10 temporadas como titular en Green Bay ha conseguido 94 victorias, tiene una efectividad del 65 por ciento, 38,502 yardas por aire y 313 pases de anotación por solo 78 intercepciones.
La calidad de Rodgers no está en duda pero su longevidad sí genera cuestionamientos, pese al espíritu de ‘Ave Fénix’ que ha demostrado pues no es la primera vez que lo operan de la clavícula.
Durante la campaña de 2013 el mariscal de los Packers sufrió la misma lesión que aquejó el año pasado, en el juego de la Semana 9 contra los Chicago Bears, aunque esa vez fue en el brazo izquierdo. Luego de ausentarse ocho partidos donde Green Bay solo logró dos victorias, regresó en la Semana 17 ante los mismos Bears para avanzar a Playoffs. El récord de 8 ganados, 7 perdidos y un empate apenas alcanzó para el Juego de Comodines donde fueron superados por los 49ers.
El año pasado los Packers no quisieron arriesgar una lesión aún más preocupante, al tratarse de su hombro derecho, su brazo de lanzar, y llevaron con más calma la reaparición de Rodgers. El ‘12’ solo requirió nueve semanas para volver a vestirse y jugar contra los Panthers donde tiró tres pases de TD y 290 yardas, aunque no anduvo preciso con tres intercepciones. Tras ese tropiezo se pusieron 7-7 y, sin aspiraciones de Playoffs, Green Bay guardó a su joya más preciada.
Pero los fans con "cabezas de queso" no deberían preocuparse, Aaron se ha visto lanzando a plenitud desde el comienzo de los training camps y este jueves 16 de agosto se volvió a uniformar para dirigir un drive contra los Steelers. La serie culminó en pase de touchdown colaborando en la aplastante victoria de Green Bay 51-34 sobre Pittsburgh en el segundo juego de pretemporada.
Este 2018 el reto no será fácil. La Conferencia Nacional está plagada de talento comenzando con los actuales campeones Philadelphia Eagles y su rejuvenecido potencial. Los Minnesota Vikingstienen una de las mejores defensas, los New Orleans Saints un equipo joven comandado por un veterano leyenda como Drew Brees y los Rams de Los Ángeles parecen favoritos a ser campeones.
Sin embargo, los Packers pueden meterse a la pelea por la NFC. Rodgers tiene la calidad suficiente para dominar a sus rivales, y sus próximos 35 años de edad simplemente serán un factor más a su favor para demostrar porque es considerado por muchos como el mejor quarterback de toda la NFL.
Es cierto, Green Bay le dio un puntapié dejando ir a Jordy Nelson a los Oakland Raiders, su principal cómplice en los últimos años, pero intentó enmendar su error firmando a un ala cerrada poderoso como Jimmy Graham, un target infalible en las diagonales, y mantuvo a dos amenazas explosivas como Davante Adamas y Randall Cobb con las que podrá volver a superar los 40 TDs.
Que no les quepa duda. Aaron Rodgers saltará al campo de Lambeau Field el próximo domingo 9 de septiembre ante los Bears, con hambre de gloria y protagonismo arrancando su undécima campaña como titular. No será nada extraño verlo encaminar a Green Bay a su noveno viaje a postemporada bajo su tutela, acumulando más récords, triunfos e incluso peleando por el trofeo George Halas de la NFC a finales de enero, como el tremendo QB que lleva una década codeándose con la elite de la NFL.