Realizaron minuto de silencio por un jugador que estaba vivo
El club de futbol amateur irlandés Ballybrack FC tuvo que pedir unas humillantes disculpas el miércoles tras haber anunciado que uno de sus jugadores, el español Fernando Nuno Lafuente, había muerto.
El fin de semana, el equipo informó que no se sentían con fuerzas para jugar su partido de liga contra el Arklow debido a la muerte del jugador en un accidente de moto el viernes por la mañana, pero el español en realidad se había mudado.
Según la radiotelevisión pública irlandesa RTÉ, el secretario del club dejó el cargo tras el escándalo. Por su parte el jugador, que de acuerdo a la prensa irlandesa trabaja para una empresa informática, parece que aceptó la noticia de su fallecimiento con serenidad y buen humor.
"Para mí es divertido porque he podido asistir a mi propia muerte", dijo explicando que supo lo ocurrido el martes cuando le llamaron mientras estaba jugando a un videojuego tras su jornada laboral. "Me dijeron: 'eres una estrella'", agregó.
Fernando Nuno Lafuente sugirió que pudo ser una acción premeditada, pues lo contactaron del Ballybrack la semana pasada para advertirle que podía oír hablar de él en las noticias; nunca se imaginó que la cosa iría tan lejos.
Las autoridades de la liga amateur irlandesa abrieron una investigación y afirmaron estar desconcertadas por lo ocurrido.
"Honestamente, no sabemos por qué lo hicieron", dijo el presidente de la Liga Leinster Senior, David Moran, a la RTÉ. "Parece un poco extremo hacer algo así para anular un partido", agregó.
El fin de semana, todos los partidos de esa liga estuvieron tuvieron un minuto de silencio previo. La liga incluso publicó el lunes un mensaje de condolencias en un periódico irlandés.
Moran explicó que se puso en contacto con el club para transmitir su pésame, poder asistir al funeral y preguntar qué podían hacer para ayudar a la familia. La respuesta de un responsable del Ballybrack fue que el cuerpo fue repatriado a España el sábado.