Copa América 2020, negocio cerrado; organización en veremos
En su afán por facturar más, la Conmebol modificó el formato del torneo de selecciones más antiguo del mundo y dispuso que la Copa América 2020 se juegue simultáneamente en los dos extremos del continente sudamericano. Pero el cambio ha desatado una puja interna en la entidad por la definición del certamen, fogoneada por la política y una vieja cuenta pendiente. Argentina y Colombia, países cuyas capitales están separadas por una distancia de seis horas vía área, organizarán conjuntamente la Copa América del próximo año, con el mismo número de participantes — diez seleccionados sudamericanos, más dos invitados — pero más partidos.
Se jugarán dos hexagonales en cada uno de los países, de manera tal que cada equipo jugará por lo menos cinco duelos. Detrás de la decisión, la Conmebol se asegura un mínimo de 140 millones de dólares por la comercialización del certamen a cargo de la empresa japonesa Dentsu, pero el margen de ganancia puede ampliarse con mayores ingresos por derechos de televisión y de auspiciantes.
La entidad cree además que al designar en cada zona a países limítrofes a los organizadores se asegura estadios colmados. En la zona norte jugarán Colombia, Brasil, Venezuela, Ecuador, Perú y uno de los dos países invitados al torneo, que aún no están definidos. Qatar y China son los que tienen mayores posibilidades. El primero, a través de su línea aérea, es patrocinador de la Conmebol. La zona sur incluye a Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Bolivia y a otro de los invitados.
“En este nuevo período comenzará la Conmebol de los récords”, adelantó su presidente Alejandro Domínguez durante el 70mo Congreso ordinario de la entidad, que se realizó esta semana en Río de Janeiro. Recordó que en 2016 cuando asumió “tuvimos que enfrentar a muchas mafias que todavía seguían gobernando al fútbol o que querían volver a hacerlo”, en referencia a los dirigentes sudamericanos involucrados en el escándalo de corrupción de la FIFA. “Queridos amigos, hoy les puedo decir, que tenemos una organización donde reina la transparencia”, destacó.
El cambio de formato de la Copa América en 2020, en sintonía a un Eurocopa que se jugará en múltiples ciudades al mismo tiempo, se avizora como un gran negocio para Conmebol, pero ha desatado una pugna interna por la definición del certamen. La Conmebol avisó que los partidos a partir de los cuartos de final, semifinales y final se jugarán en un solo país. En el cara a cara que mantuvieron esta semana en Río de Janeiro los líderes de cada una de las federaciones con Domínguez, Colombia reclamó una “atención histórica” ya que sólo una vez organizó el certamen en 2001.
Los colombianos, además, se comprometieron a no cobrar impuestos a la organización del certamen, con el aval por escrito del presidente Iván Duque. Argentina, anfitrión en nueve ocasiones, la última en 2011, propuso que la decisión sobre la sede para las instancias finales se someta a votación en el consejo de la Conmebol. A diferencia de Colombia, el país austral no dio garantías todavía respecto a los impuestos. El gobierno del conservador Mauricio Macri lleva adelante un severo plan de ajuste monitoreado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) luego de un desembolso récord de 56.000 millones de dólares en 2018 para controlar una crisis cambiaria.
La disputa retrotrae a la tensión que mantuvieron ambas federaciones en 2001 cuando Argentina desistió de participar en la Copa América de 2001 a causa de la violencia que desangraba a Colombia. “Ya hicimos la Copa América nosotros solos hace casi 20 años, cuando el país vivía momentos más difíciles que los actuales. No veo porque ahora tenga que ser compartida y más con el país más distante de todos. Creo que la Copa América debería ser solo en Colombia”, expresó el ex futbolista colombiano Faustino Asprilla por Twitter.
El presidente de Conmebol aspira a que la decisión se tome por consenso entre ambas federaciones y pidió un mes para mediar. Si no tiene éxito, los dirigentes sudamericanos votarán en mayo en Asunción o al mes siguiente en París previo a la disputa del Mundial femenino de fútbol. Pero pase lo que pase, la Copa América 2020 se jugará en dos sedes. Porque el negocio debe estar garantizado.