Warriors confían en recuperarse frente a Raptors
Los Raptors de Toronto fueron ágiles y creativos. Son capaces de castigar a equipos al contragolpe apenas cometan un error. Los Warriors de Golden State sintieron que estaban viendo una copia de ellos mismos en el primer partido de la final de la NBA y ahora tienen que enmendar esa situación. No hay problema, dicen.
“Se trata del primero de cuatro, no el primero de uno”, declaró Klay Thompson. “Así pues, falta mucho básquetbol por jugar todavía”. Estar abajo 1-0 podría ser inusual para los Warriors, pero eso no parece incomodarles. Golden State había ganado el primer duelo de una serie en 12 ocasiones seguidas hasta su derrota del jueves por 118-109, y los reinantes bicampeones no se rezagaban en una final de la NBA desde que Cleveland se les despegó 2-1 en 2015.
El entrenador de Golden State Steve Kerr ha señalado la deficiente transición defensiva de su equipo en el primer encuentro, en el que Toronto aprovechó su velocidad para anotar 24 puntos en contragolpes y convertir 17 balones perdidos de los Warriors en 17 puntos. “Ellos atrapaban el balón en el aro y simplemente encestaban.
En lugar de cometer graves errores como nos pasó, tendremos que hacer ajustes para el segundo partido e intentar reforzar atrás”, afirmó Thompson el sábado.
“También el descanso de 10 días, quizá hizo que perdiéramos el ritmo. Fue una combinación de aspectos. Pero de algo estoy seguro: sé que mejoraremos mañana”. Kerr dijo que los Raptors le recordaron el juego de los Warriors, con Paskal Siakam manejando el balón en transición igual que Draymond Green.
Siakam fue por mucho el jugador más eficaz en el primer partido al anotar 32 puntos mientras que Green tuvo una noche difícil en la que acertó dos de nueve lanzamientos de campo. Sin embargo, los Warriors no se preocupan y confían en su capacidad para enfrentar cualquier situación posible en su quinta final consecutiva en la NBA. “Ellos tienen anillos y pueden tener confianza”, dijo el base de los Raptors Kyle Lowry.
“No deben preocuparnos necesariamente de ellos. Debemos continuar preocupándonos de nosotros. Van a ser ellos y van a hacer su juego, pero en cuanto a nosotros, debemos concentrarnos en nosotros y en lo que debemos hacer”.