Sorpresa en el Infierno. Toluca que venía de ser goleado en dos juegos, despertó y le endilgó su segunda derrota en el torneo, y tres sin ganar de forma consecutiva, por 2-1.
Con plena consciencia de que se jugaban la cabeza de su director técnico, los Diablos Rojos del Toluca salieron a jugarse la vida y tomaron aire. Con el triunfo llegaron a 16 puntos, volviéndose a meter en zona de Liguilla, en tanto que los Camoteros peligran de caer del tercer lugar de la tabla.
Desde el primer minuto, se vio a cuadro rojo con otra actitud, con otra dinámica, con otra misión, dejando de lado el pase corto y al pie, siendo más directos en el ataque.
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Con Leo Fernández jugando más suelto, con más posibilidades de explotar su capacidad en corto y largo, el Toluca se fue por el gol que le diera el manejo de partido, el que logró con un tanto de fuera del área de Kevin Castañeda (17’), un tiro en el que el portero poblado Antony Silva pudo hacer más.
Puebla se fue encima, dejando espacios que Toluca explotó bien, y cerca del final del primer tiempo el chileno Valber Huerta amplió la ventaja, aprovechando un rechace de Silva (44’).
Antes de llegar al descanso, Israel Reyes aprovechó una distracción en la zaga roja para acortar distancia, rematando en el área chica (45+2’).
El juego se abrió, aunque no fue de ida y vuelta, ambas escuadras tuvieron la oportunidad de marcar, siendo los rojos los más cercanos en marcar el tercero, lo que no lograban por las atajadas del portero Silva.
Nicolás Larcamón metió a todo lo que le quedaba de su arsenal ofensivo, buscando un remate por todo lo alto, pero la defensiva de los rojos se transformó, se comportó a la altura y guardó el marcador.