Liverpool vence a Wolverhampton con nueva polémica del VAR
Los aficionados del Liverpool se despidieron de 2019 coreando “Campeones del mundo” por primera vez en Anfield. Es muy probable que también entonen “Campeones de Inglaterra” en 2020.
El senegalés Sadio Mané se aseguró que el Liverpool llegara al punto medio de la temporada con una ventaja de 13 puntos _y un partido pendiente_ que luce inquebrantable después de vencer el domingo 1-0 al Wolverhampton.
Y lo único que los seguidores del Wolverhampton pudieron responder es: “¿Esto sigue siendo fútbol?”
Fue, obviamente, el reflejo de la frustración por la aplicación de la tecnología del videoarbitraje (VAR) en su primera temporada en la Liga Premier. Incluso si las decisiones fueron las correctas por el árbitro central Anthony Taylor.
El gol de Mané fue anulado en principio por Taylor por una mano, pero de hecho fue habilitado por el hombro de su compañero Adam Lallana. Posteriormente sí hubo una mano del defensor del Liverpool Virgil Van Dijk que aparentemente no tuvo peso en la decisión.
“Sólo escuché reclamos de una mano, pensé que era por Adam”, dijo Van Dijk. “¿Qué podemos hacer? Tomaron la decisión y el gol fue válido”.
A simple vista habría problemas para encontrar una razón para invalidar el tanto del empate de Pedro Neto, pero una vez que se le insertaron líneas al nublado video, el sistema de videoarbitraje decretó el fuera de juego desde sus oficinas centrales en Londres.
“El VAR nos está matando”, afirmó el capitán de los Wolves, Conor Coady. “Constantemente está en contra nuestra. No sé qué estamos haciendo mal. Está afectando los juegos. A nadie le gusta”.
El Liverpool tiene una ventaja del más del doble de los seis puntos que cedió a estas alturas de la campaña anterior, cuando fue rebasado por el Manchester City.
El margen parece irremontable para un equipo que ha sufrido tres décadas de frustraciones desde que ganó por última vez el campeonato inglés en 1990, tres años antes de que se entregara por primera vez el nuevo trofeo de la Premier.
Por su parte, el Chelsea remontó con dos goles en un lapso de cuatro minutos y derrotó el 2-1 al Arsenal en duelo de la Premier, arruinando el primer partido en casa del técnico español Mikel Arteta al frente del club del norte de Londres.
El guardameta del Arsenal, Bernd Leno, falló un intento de despejar un tiro libre de Mason Mount, lo que permitió que Jorginho empatara el partido a los 83 minutos después de que Pierre-Emerick Aubameyang abriera el marcador por los locales a los 13.
Jorginho se había salvado de milagro de una segunda tarjeta amarilla luego de derribar a Matteo Guendouzi.
El gol del triunfo llegó en un contraataque del Chelsea que arrancó desde los límites de su propia área, y Tammy Abraham pudo avanzar sin problemas antes de intercambiar pases con el extremo brasileño Willian antes de mandar el balón por entre las piernas de Leno a corta distancia.
El resultado deja a Arteta con un punto luego de sus primeros dos partidos desde que fue contratado como sucesor de tiempo completo de Unai Emery.
Mientras que el Arsenal se mantiene en la 12da posición de la tabla, el Chelsea se encuentra 11 puntos arriba, en la cuarta casilla de la tabla _sitio que da boleto a la Liga de Campeones_ después de que los dirigidos por Frank Lampard se recuperaran rápidamente de un descalabro en casa ante el Southampton.
En el último partido del domingo, el Manchester City venció 2-0 al visitante Sheffield United en el Estadio Etihad.
Goles del delantero argentino Sergio Agüero a los 52 y del mediocampista belga Kevin De Bruyne a los 82, permiten al City mantenerse en el tercer sitio de la tabla y un punto detrás del Leicester, que el sábado superó 2-1 a West Ham.