El austriaco Dominic Thiem no dudó ante el alemán Alexander Zverev y le superó por 3-6, 6-4, 7-6 (3) y 7-6 (4) tras tres horas y cuarenta minutos de partido, y se enfrentará en la final de este domingo al serbio y vigente campeón Novak Djokovic.

''Ha sido un partido increíble, muy reñido y los dos estuvimos cerca. Sabía que contra Sascha iba a tener que jugar a mi máximo nivel para alcanzar la final'', comentó tras la conclusión del choque.

No fue un espejismo su inspiración frente a Rafael Nadal en los cuartos de final y puso punto final al recorrido del jugador de Hamburgo que prometió destinar su premio en metálico en el caso de que ganara el torneo a la reparación de daños causados por los incendios en Australia.

Sin embargo, el comienzo de Thiem fue titubeante tras conceder tres de sus primeros juegos al servicio y arrancar el partido con un desfavorable 3-6.

El partido fue en este momento interrumpido por unos problemas técnicos relativos a la iluminación de la pista central Rod Laver y fue reanudado a los pocos minutos tras una rápida reparación.

La reacción del austriaco fue instantánea en detrimento de un Zverev que fue deshinchándose, molesto en parte por la presión ejercida por Thiem en los largos peloteos.

Como consecuencia se apuntó el segundo parcial para igualar el partido e inició el tercer asalto de la misma forma, cómodo al saque e intimidando al rival desde el la zona del resto.

No fue suficiente su empuje durante el set y tuvo que apuntarse el parcial en un desempate psicológico que le daría alas para cerrar el partido por un definitivo 7-6 (4).

A pesar de su victoria, el austriaco atravesó ciertos momentos de dificultad física como consecuencia en parte del desgaste acumulado tras el partido frente al balear en cuartos.

Dominic Thiem tendrá la oportunidad de poner fin a los malos resultados cosechados en sus dos únicas finales Grand Slam, disputadas en las últimas ediciones de Roland Garros, donde cayó ante Rafael Nadal.

A diferencia de estas, será la primera vez que el austriaco se estrene en una final de competición major lejos de la tierra batida de París y tendrá como rival al serbio Djokovic, con el que mantiene un balance de cuatro victorias y seis derrotas.

Sin embargo, el joven de 26 años contará con dos antecedentes a su favor: tanto el último partido que disputaron en las recientes Finales ATP, como los dos choques que han mantenido hasta ahora en Grand Slam, ambos disputados sobre la tierra de París en 2016 y 2019, cayeron de su lado.

Hasta hace poco, Dominic Thiem no tenía intenciones de disputar los Juegos Olímpicos. Sin embargo, el austriaco cambió su decisión (impulsado por el ganador de dos medallas de Oro y coach Nicolás Massú) y anunció que competirá en Tokio 2021

Sin embargo, este viaje no dejó conforme a su círculo familiar. Wolfgang Thiem, su padre y una de las piezas importantes de su equipo, criticó de alguna manera las declaraciones en las que Dominic se muestra ilusionado por viajar a Asia.

"Ahora quiere jugar los Juegos, ese fue su deseo express. Es algo que me ha sorprendido, pero puede ser que con ese título de Grand Slam esté un poco más liberado y pueda pensar en cosas como esas", dijo Wolfgang.

"Los Juegos Olímpicos no tienen demasiado en cuenta el tenis. Dominic tiene 27 años: es el momento de mirarse a uno mismo y de tener cuidado", razonó el padre cuyas mayores preocupaciones parecen ser el cansancio y estado físico de su hijo en una temporada hiperexigente.

El austríaco Dominic Thiem volvió a confirmar su condición como uno de los jugadores más en forma tras el confinamiento al alzarse este miércoles con el triunfo en el torneo de exhibición de Berlín, tras doblegar en la final por 6-7-(4), 6-4 y 10-8 al italiano Matteo Berrettini.

Una victoria que premió la fortaleza mental del tenista centroeuropeo, que cuando parecía tenerlo todo más en contra logró forzar la tercera y definitiva manga, en la que Thiem se impuso en el “super tie-break” por 10-8. 

Ni los cañonazos de Berrettini, con saques superiores a los 220 kilómetros por hora, ni la imposibilidad de forzar ni una sola pelota de ruptura en todo el primer set desesperaron al jugador austríaco.

Y eso que Thiem, número 3 de la clasificación mundial, pareció contra las cuerdas tras ceder la primea manga en el “tie-break” por 7-4 y situarse con dos bolas de “break” adversas en el segundo juego de la segunda manga.

Pero entonces surgió la mejor versión de Dominic Thiem que no sólo logró salvar su servicio, sino que consiguió situarse con una ventaja de 4-3 en el marcador, tras romper, por primera y única vez en el encuentro, el servicio del italiano.

Un “break” que pareció dar alas al austríaco sobre la hierba berlinesa, en la que desde entonces sólo hubo un jugador, Dominic Thiem. 

Superioridad que permitió al pupilo del chileno Nicolás Massú no sólo alzarse con la segunda manga por 6-4, sino también con la tercera, en la que el centroeuropeo se impuso en el “super tie-brek” por 10-8.

Un resultado que permitió a Thiem, que el pasado sábado cayó en la final de su torneo, el “Thiem’s 7” ante el ruso Andrei Rublev, alzarse con su segundo torneo tras la vuelta a la competición, tras imponerse el pasado mes de junio en el polémico Adria Tour.

Por el contrario, habrá que esperar hasta el próximo viernes para conocer la ganadora del torneo femenino, tras la decisión de la organización de posponer la final entre la checa Petra Kvitova y la ucraniana Elina Svitolina, prevista para hoy, ante la falta de luz debido al retraso provocado por la lluvia caída en la capital alemana.

El número tres del tenis mundial, Dominic Thiem, se impuso este viernes en la semifinal del torneo de exhibición "Thiem's7" de Kitzbühel al español Roberto Bautista y pasó así a la final de este certamen, organizado por el propio jugador austríaco.

El astro local se impuso al español, duodécimo tenista del ránking ATP, en dos horas y media de juego por 6-7 (5), 6-2 y 6-2 y jugará este sábado por el cheque ganador de 100.000 euro (113.000 dólares). 

En la final, Thiem se enfrentará al ganador del encuentro entre el italiano Matteo Berrettini (8) y el ruso Andrej Rublev (14).

El perdedor se medirá con Bautista en el partido por le tercer puesto del Thiem's7, jugado ante un máximo de 500 espectadores, siempre con distanciamiento físico y otras reglas sanitarias para evitar contagios con el coronavirus.

Este certamen es uno de los que se disputan en Europa a la espera que se retome el circuito de la ATP, suspendido desde marzo por la pandemia de la COVID-19.

El austríaco Dominic Thiem, número tres del mundo, ha ganado este viernes la final del Austrian Pro Series, un torneo sobre tierra batida que enfrentaba a las 16 mejores raquetas del país alpino.

Thiem se impuso con claridad en 59 minutos a David Pichler, número 343 del mundo, por 6-2 y 6-0, y cumplió así con su papel de gran favorito en el torneo que se disputó en la localidad de Maria Enzersdorf.

La final se jugó sin espectadores debido a la reglas vigentes en Austria para evitar contagios.

La mejor raqueta austríaca ha estado envuelta en la polémica por su participación en el Adria Tour organizado por Novak Djokovic, número uno del mundo, y que se saldó con al menos 10 contagiados por COVID-19 al ignorarse medidas elementales de prevención. 

En un mensaje colgado en su cuenta de Instagram, el tenista austríaco dijo el jueves sentirse "consternado" cuando recibió la noticia de los positivos de Djokovic, del búlgaro Grigor Dimitrov (19) y del croata Borna Coric (33).

"Jugamos sin público durante semanas, así que estábamos más que contentos con los aficionados en esta competición. Confiamos en las reglas contra el coronavirus del Gobierno serbio pero fuimos demasiado optimistas", reconoció en el mensaje. 

"Nuestro comportamiento fue un error, actuamos de forma demasiado eufórica. Los siento muchísimo. A mí me han hecho la prueba cinco veces desde entonces y el resultado siempre ha sido negativo", aseguró el número 3 del mundo.

Dominic Thiem se disculpó el jueves por haber participado en una gira de exhibiciones organizada por Novak Djokovic, en la cual cuatro tenistas dieron positivo por coronavirus.

“Nuestro comportamiento fue equivocado, nos manejamos con mucha euforia. Realmente lo lamento”, escribió el número tres del ránking mundial en su cuenta de Instagram.

Djokovic, número uno mundial, arrojó positivo el martes. Grigor Dimitrov, Borna Coric y Viktor Troicki también dieron positivo tras competir en el Adria Tour, la gira de exhibiciones en Serbia y Croacia.

Miles de espectadores acudieron a los partidos en Belgrado y Zadar, balneario croata en la costa del Adriático, sin seguir las medidas de distanciamiento social.

Thiem ganó el primer evento en Belgrado el 14 de junio.

“Estuvimos jugando sin gente durante varias semanas, por lo que estábamos contentos de tener gente en el evento”, señaló el austríaco. “Confiamos en las disposiciones del gobierno de Serbia sobre el coronavirus, pero fuimos demasiado optimistas”.

Thiem, dos veces subcampeón del Abierto de Francia y que perdió ante Djokovic en la final del Abierto de Australia este año, se ha sometido a cinco pruebas de diagnóstico en los últimos 10 días y ha dado negativo en todas.

La final del evento en Croacia fue cancelad, al igual que el resto de la gira en otros países.

Djokovic dijo el martes que él y su esposa dieron positivo y reconoció que fue “demasiado prematuro” montar el torneo.

El brote de coronavirus provocó la paralización de las giras de la ATP y WTA en marzo. Recién la semana pasada se dieron a conocer los planes para reanudar los torneos profesionales en agosto.

Pero los contagios han puesto en duda si es seguro retomar la actividad del tenis competitivo, incluyendo el Abierto de Estados Unidos, que debe comenzar el 31 de agosto sin público en Nueva York. Djokovic tildó de “extremas” las normas sanitarias que se prevén para el US Open.