Llega ''Aztech'', primera película mexicana de ciencia ficción en 10 años
Está escrito en las profecías aztecas: cuando un ciclo esté por acabar, caerá fuego incesante en la Tierra. Los relatos prehispánicos cuentan la visión de una gran luz que permaneció por días y noches en el cielo poco antes de la llegada de los españoles, que marcó el fin de varias culturas.
Ahora, nueve cineastas mexicanos se han dado a la tarea de explorar ese tema con una antología de ciencia ficción titulada Aztech, que tras cuatro años de trabajo llega a la pantalla.
La cinta, que requirió de la colaboración de más de mil personas, comienza con objetos provenientes del espacio cayendo en distintos puntos de México, ocasionando eventos bizarros en la población y que provocan que las profecías cobren vida.
“El que cayera fuego del cielo lo tomamos como premisa para la película y, a partir de ahí, que ese sería el presagio para algo nuevo”, comenta Issac Basulto, productor del largometraje que estrenará en Feratum, festival de cine de género, el viernes.
“Hay historias en el mar, el bosque, otras con naturaleza; en Nueva York, Canadá. Se filmó en Ciudad de México, Teotihuacán, Tepoztlán, había que generar robots, criaturas fantásticas”.
Jaime Jasso, creador de escenarios digitales en Rogue one y el Episodio VII de Star Wars, codirige con Fernando Campos la historia llamada El camino, que ocurre en el espacio. Gustavo Sánchez Parra (Amores perros) tripula una nave e interactúa con un robot humanoide, con lo que inicia toda la historia.
“El camino es un efecto visual de principio a fin, todo se tuvo que hacer, se necesitaban seis o siete meses de trabajo para apenas lograr 10 segundos en pantalla; hay escenarios creados por computadora, un personaje creado con ella, quería la mejor calidad posible con recursos mexicanos”, comenta Jasso.
“Se construyeron algunas cosas físicas pero el reto es que la gente no se diera cuenta de lo virtual y lo real”, añade.
Gigi Saúl Guerrero (Into the dark), Leopoldo Laborde (Un secreto de Esperanza), Francisco Laresgoiti (2033), Alejandro Molina (De día y de noche), Ulises Guzmán (Malapata), J. Xavier Velasco (Viajero eventual) y Rodrigo Ordóñez (Depositarios) completan la lista de realizadores de los nueve episodios que componen la película.
Cada equipo tuvo que buscar su propio financiamiento. Ordóñez, por ejemplo, puso de su bolsillo los 5 mil dólares (unos 100 mil pesos) para filmar Los solitarios, con Sofía Espinosa (Gloria) e Ignacio Guadalupe (Los Héroes del norte). El filme está valuado en 30 millones de pesos, que es el promedio de una comedia romántica actual, pero por debajo de otras de acción o históricas como Salvando al soldado Pérez y 5 de mayo, la batalla.
“La historia no tiene efectos especiales y habla sobre la soledad, de un abuelo y su nieta, cuando esta última se va a ir ya de ahí. En los sembradíos cae el objeto y empieza a provocar un fenómeno fantástico, creo que se acerca al realismo mágico”, considera Ordóñez.
El largometraje cuenta con una historia hecha en Canadá de la mano de Gigi Saúl Guerrero, quien decidió realizar una historia con tintes de comedia.
“Quise hacer algo así pero muy gore, y se trata de un paletero mexicano que vive en Vancouver y es feliz vendiendo helados, pero el meteorito cae en su carrito y lo que vende se vuelve tóxico, está en spanglish”, dice.
Aztech se estrenará en Feratum de manera presencial; virtual, a través de Klic de Cinépolis, para luego tener un par de funciones en autocinemas y buscar recorridos en salas o plataformas para 2021.
NUEVE IDEAS
La cinta está en formato de antología. Es decir, son nueve episodios con un evento que las concatena: el meteorito.
Los nueve trabajaron sus historias de manera independiente.
30 MILLONES DE PESOS fue el costo de producción. Lo mismo que cuesta una comedia.