Su hijo nació muerto, es juzgada por homicidio
Un tribunal de El Salvador continuará el viernes el juicio a Evelyn Hernández, acusada de homicidio agravado por parir en su casa a un bebé presuntamente muerto, bajo la drástica legislación contra el aborto del país centroamericano.
El juicio, que comenzó en julio y fue reanudado este jueves, deberá continuar la mañana del viernes por orden del juez José Martínez, que tomó esta decisión porque una agente de policía que es testigo de la Fiscalía no había sido citada, declaró a la AFP la abogada defensora Elizabeth Deras.
“Salimos optimistas de la jornada de este día, no hay elementos que incriminen a Evelyn, por eso esperamos que el juez declare la absolución”, sostuvo Deras.
Se trata de la continuidad del juicio que se inició el 16 de julio y sirvió para escuchar los testimonios de cinco de seis testigos en el Centro de Justicia de la localidad de Ciudad Delgado, ubicada en la periferia de San Salvador.
“Solo les quiero decir que yo soy inocente”, y “sé que él (juez) va a hacer justicia”, declaró Evelyn a la prensa al entrar al tribunal.
Hernández, de 21 años, había sido condenada en julio de 2017 a 30 años de cárcel, pero la sentencia fue anulada en febrero de este año.
Este jueves, la Fiscalía llevó a la sala a una patóloga que estudió el caso, y a uno de los dos agentes de la policía que participaron en la detención.
Por su parte, la defensa presentó a tres vecinos, dos de los cuales fueron testigos del parto y otro quien llevó a Hernández al hospital.
El caso se remonta al 6 de abril de 2016, cuando la joven, según Deras, tuvo un “parto extrahospitalario” en una letrina. Luego, al llegar a un hospital de la oriental ciudad de Cojutepeque, quedó detenida y acusada de homicidio agravado.
En un primer momento del proceso se informó que su embarazo fue producto de una violación, aunque ahora las abogadas defensoras se abstienen de hablar públicamente de las circunstancias a pedido de Hernández, quien vive en una comunidad bajo influencia de pandillas.
El parte forense del Instituto de Medicina Legal no es concluyente sobre lo ocurrido en el parto, aunque la defensa está convencida de que el niño nació muerto porque aspiró meconio, el primer excremento que, al ser expulsado dentro del vientre, causa daño al feto.
En octubre de 2018, la Corte Suprema de Justicia anuló una sentencia de 30 años de prisión por homicidio agravado a Hernández por “falta de fundamentación e infracción a las reglas de la sana crítica” en las pruebas presentadas.
En virtud de la resolución de la Corte, en febrero fue ordenada la libertad de la joven y la apertura de un nuevo juicio con un tribunal diferente, tras pasar 33 meses en la cárcel.
En esta oportunidad, la Fiscalía General de la República (FGR) cambió el cargo contra Hernández, quien ya no es acusada de homicidio agravado (con dolo y premeditación), sino de homicidio agravado por omisión (por negligencia, sin dolo), aunque insistirá en una pena de entre 30 y 50 años de cárcel, según la defensa.
La experta de la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad) Teresa Delgado, lamentó que grupos religiosos alienten la “severidad” del sistema de justicia, que se “ensaña” con las mujeres pobres que tienen partos fuera de los centros hospitalarios.
– “¡Abajo el patriarcado!” –
Bajo el grito de “¡Libertad para Evelyn!” y “¡Abajo el patriarcado!”, medio centenar de feministas protestaron frente al tribunal con camisetas que tenían la inscripción “Libertad para las 17 y más”.
En El Salvador actualmente hay 16 mujeres encarceladas por abortos, algunas de las cuales sufrieron emergencias obstétricas, bajo una severa legislación que prohíbe la interrupción del embarazo en todas sus formas.
El artículo 133 del Código Penal salvadoreño establece una pena de 2 a 8 años por aborto. Sin embargo, fiscales y jueces tipifican los casos de aborto -incluso los espontáneos- como “homicidio agravado”, un delito penado con 30 a 50 años de prisión.
En el último año, cinco mujeres sentenciadas en este tipo de casos salieron de la cárcel, algunas de ellas con la pena conmutada.
“Si la vuelven a encarcelar sería una injusticia y tendría graves repercusiones para la vida de Evelyn”, advirtió la coordinadora del Colectivo Agrupación Ciudadana para la Despenalización del Aborto Terapéutico, Ético y Eugenésico, Moren Herrera.