AI exige investigar a fondo presunto envenenamiento de Navalni
Amnistía Internacional (AI) exigió hoy a las autoridades rusas investigar a fondo el "inesperado y crítico deterioro de la salud" del líder de la oposición Alexéi Navalni y permitir un diagnóstico y tratamiento adecuados.
"Dadas las graves acusaciones sugeridas como causa de la enfermedad de Alexéi Navalni, exigimos una investigación inmediata e independiente. Si se demuestra una intención delictiva, los que ordenaron y perpetraron este crimen deben comparecer ante la Justicia", declaró Natalia Zviáguina, responsable de AI en Rusia.El líder opositor ruso se encuentra ingresado en estado inconsciente en una unidad de cuidados intensivos después de que fuera envenenado, aseguró hoy su portavoz, Kira Yarmysh.
El opositor, de 44 años, se sintió mal a bordo del avión en el que regresaba a Moscú desde la ciudad siberiana de Tomsk y la aeronave tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Omsk, donde fue hospitalizado.El comunicado difundido este jueves por AI señala que "la administración del hospital debe brindar acceso completo a la información sobre su tratamiento a su familia y médicos de su elección".
"Ya se informó de que a su médico personal se le negó acceso a los resultados de la prueba y no se le informó sobre el tratamiento. A la luz de las suposiciones sobre un posible envenenamiento, esto solo aumenta las sospechas", denunció Zviáguina.La representante de AI señaló que lo sucedido a Navalni "es innegablemente similar" a los envenenamientos del político Vladímir Kara-Murza y el productor de la banda punk Pussy Riot, Piotr Verzílov, ambos víctimas de sustancias tóxicas "no identificadas".
Además, recordó el presunto envenenamiento de Navalni de hace un año, cuando estaba detenido."Ninguno de estos incidentes fue investigado", afirmó.
Hasta el momento, el estado de Navalni, quien se encuentra inconsciente, en coma y conectado a un respirador, es calificado de grave estable.El diagnóstico oficial fue "alergia", lo que fue puesto en duda por los médicos de Navalni y los correligionarios del político, quien con sus denuncias de corrupción entre altos cargos y el entorno de presidente, Vladímir Putin, se ha convertido en el azote del Kremlin.