Explosión en una mezquita chiíta de Afganistán causa decenas de muertos
Suicidas atacaron una mezquita chiíta en la ciudad de Kandahar, en el sur de Afganistán, y mataron al menos a 35 personas, en la segunda semana consecutiva en que militantes bombardean las oraciones del viernes y dan muerte a decenas de fieles del credo minoritario.
El ataque del viernes en Kandahar no fue reivindicado de inmediato, pero el Estado Islámico se había atribuido uno similar perpetrado una semana antes, en el que murieron decenas de chiíes en la ciudad septentrional de Kunduz.
Sardar Mohammad Zaidi, imán de la mezquita, dijo que hubo cuatro atacantes, dos de los cuales se volaron en la entrada, lo que permitió a los otros dos acceder al interior, donde detonaron sus explosivos entre unos 3.000 fieles justo cuando terminaba la oración del viernes.
Un funcionario sanitario del hospital Mirwais de Kandahar dijo a Reuters que había confirmado 35 muertos y que estaban atendiendo a 68 heridos.
Los atentados han causado conmoción y terror entre los miembros de la minoría chiíta de Afganistán y ponen en duda la pretensión del movimiento talibán gobernante de haber restaurado la seguridad desde que tomó el control del país en agosto.
"Cuando llegué a la mezquita, vi heridos, cadáveres y gente que había caído encima", dijo Haji Sarwar Hazara, un contratista de construcción local que llegó poco después de la explosión.
El portavoz de los talibanes, Zabihullah Mujahid, dijo que las fuerzas de seguridad habían recibido la orden de capturar a los autores y llevarlos ante la justicia en virtud de la ley islámica.
Los combatientes musulmanes suníes del Estado Islámico han atacado repetidamente a los chiíes en el pasado.