En la funeraria San Martín de Ciudad Obregón, municipio de Cajeme, son velados los restos de Abel Murrieta Gutiérrez, ex procurador de Sonora y candidato de Movimiento Ciudadano que fue asesinado el jueves en plena campaña por la presidencia municipal.
Al lugar ubicado sobre la calle 200 y Tamaulipas han llegado familiares, amigos, funcionarios, empresarios, políticos, compañeros del partido que actualmente representaba y también del PRI donde militó por muchos años.
Entre ellos los hermanos Bours Castelo, Eduardo, quien era el gobernador cuando Abel Murrieta fue procurador del estado, Rodrigo quien competía también por la alcaldía de Cajeme como candidato independiente, y Ricardo quien busca la gubernatura también por Movimiento Ciudadano.
Fue este último quien a su llegada a la funeraria declaró sentirse indignado y molesto ante la incapacidad de quienes gobiernan, pues consideró que la ejecución de quien fuera su amigo, es una demostración de la incapacidad de quienes gobiernan, del poco interés que tienen en Sonora y en los sonorenses.
“Tenían miedo que llegara un hombre preparado, un hombre que sabían que iba a acabar no de mentiras sino de verdad con la delincuencia que se ha empoderado y que se ha encarnado en Cajeme donde fuerzas oscuras están ligadas con la política y con la Policía Municipal”, señaló.
A las 17:00 horas, tiempo de Sonora, se está convocando a la ciudadanía a unirse en una marcha para exigir justicia y un alto a la violencia en Cajeme, la cual saldría junto a los restos de Abel Murrieta para recorrer las calles hasta llegar a la Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe donde se oficiará una misa de cuerpo presente en punto de las 18:00 horas.
La Fiscalía General de Justicia de Sonora no ha emitido información oficial sobre los resultados del operativo que anunció horas después del asesinato, la fiscal, Claudia Indira Contreras Córdova.
Sin embargo, ha trascendido de manera extraoficial que elementos de los tres órdenes de gobierno siguen realizando operativos y cateos por la ciudad para tratar de dar con lo responsables de crimen.