AMLO y Carlos Salinas, una rivalidad de dos décadas
Las diferencias entre el líder más visible de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, y el ex presidente Carlos Salinas de Gortari, han sido de las más enconadas de las últimas dos décadas y que más han acaparado reflectores y tinta en la política nacional.
Cuando la opinión pública escucha de alguno de ellos la expresión "El Innombrable" sabe de quién se trata y quién lo dijo. Uno se convierte en el "publirrelacionista" del otro.
Prácticamente desde el 2000, los señalamientos entre ambos políticos han sido recurrentes, más desde el lado del tabasqueño, quien acusa al ex Presidente de liderar a la llamada "mafia del poder", término con el que el actual líder de Morena se refiere a un grupo de políticos y empresarios.
Uno de los episodios más antiguos en esta rivalidad ocurrió en marzo de 2000 cuando en un programa de televisión del periodista Joaquín López Dóriga debatieron Andrés Manuel López Obrador y el panista Diego Fernández de Cevallos.
López Obrador señaló al "Jefe Diego" de ser representante del "PRIAN" y de "un grupo compacto, algo muy parecido a una mafia, que ha utilizado el poder público en beneficio de una minoría en perjuicio de la mayoría del pueblo" y cuyo líder –dijo en aquella ocasión- es Carlos Salinas de Gortari.
Desde entonces, Andrés Manuel López Obrador ha sostenido su reto a Carlos Salinas para debatir públicamente y lo ha señalado como "el jefe de jefes" de la mafia del poder.
En 2003, cuando se dieron los llamados "videoescándalos", el para entonces jefe de Gobierno del Distrito Federal y quien ya era ubicado como aspirante presidencial acusó de inmediato al ex titular del Ejecutivo de ser el autor del "complot" en su contra y de utilizar ese material para impedir un proyecto alternativo de nación.
A partir de entonces, López Obrador acuñó el término de "El Innombrable" para dirigirse a quien gobernó México de 1988 al 1994.
El encono se agudizó en 2005, pues el tabasqueño señaló siempre a Salinas de Gortari de unirse con otros personajes como Vicente Fox para planear y llevar a cabo su desafuero.
Lo mismo, antes y después del proceso electoral de 2006, cuando el entonces candidato presidencial de la izquierda acusó al priísta de operar lo que ha llamado como el fraude electoral en favor del panista Felipe Calderón Hinojosa.
En 2011, Carlos Salinas de Gortari tuvo una reaparición pública como orador en un evento de la Asociación Mexicana de Agencias de Investigación de Mercado (AMAI), donde cuestionó las propuestas del "otro innombrable" en alusión a Andrés Manuel López Obrador.
Su discurso de entonces fue interpretado como "un reto a debatir" lo que el ahora dirigente de Morena aceptó de inmediato. Una semana después, la oficina del ex Presidente negó que hubiera hecho una convocatoria al entonces perredista, por lo que tal encuentro no se dio.
En marzo de 2016, Andrés Manuel López Obrador opinó a propósito de que se hicieran públicos varios aspectos de una fiesta organizada por Diego Fernández de Cevallos en una de sus propiedades a la que asistieron prominentes políticos, empresarios y líderes religiosos, entre ellos Carlos Salinas de Gortari.
"Son la maleantada del PRI y del PAN, representada por el priísta Carlos Salinas de Gortari y el panista Felipe Calderón, (que) son lo mismo", dijo el tabasqueño.