Nuevos productos salen del mercado por cancerígenos
El más reciente son las tiendas Primark que retiraron de forma urgente tres modelos de chanclas de la marca Cedar Wood State en Reino Unido por contener niveles excesivos de criseno, una sustancia química, tóxica, mutagénica y/o cancerígena para microorganismos y seres humanos, del grupo de los hidrocarburos aromáticos policlínicos -HAP-, que se origina en la combustión incompleta de combustibles fósiles y está presente en erupciones volcánicas, incendios, tubos de escape de automóviles y humo de tabaco.
En un comunicado ofrecido por la empresa, comentan que todos los clientes que hayan adquirido las flip flops para hombre en color caqui, azul o marrón recibirán un reembolso completo sin necesidad de presentar un ticket de compra. Los modelos, que han estado a la venta desde el pasado 4 de enero al 2 de junio, han sido descontinuados.
"Hemos descubierto niveles de una sustancia restringida en el producto que exceden el requerimiento de 1.0 mg/kg" - explica el comunicado.
Otro producto que contiene sustancias probablemente cancerígenas ha sido Nutella, una empresa que sufrió la retirada de varios de sus productos de marca blanca en Italia debido a que contenían aceite de palma.
El origen de la retirada fue un estudio de la Autoridad Europea para la Seguridad de los Alimentos -EFSA- del pasado mes de mayo de 2016, en el cual se alertaba del riesgo cancerígeno del consumo de aceite de palma, el cual incluso en forma de consumo moderado podría ocasionar riesgos para la salud. Según dicho trabajo, el culpable de provocar riesgo cancerígeno es el proceso de refinado al cual se somete el aceite de palma para eliminar su sabor y olor, a temperaturas cercanas a los 200 ºC.
De nuevo en relación con la empresa Ferrero, el pasado mes de julio de 2016 el organismo de control alimentario independiente Foodwatch declaró que sus barritas de chocolate Kinder podrían ser catalogadas como alimentos probablemente cancerígenos.
Su acusación se basó en el hecho de que, según sus pruebas, los envoltorios de esos chocolates contendrían niveles elevados de hidrocarburos aromáticos de aceites minerales o MOAHs, una sustancia derivada del refinado del aceite de palma, potencialmente tóxico para el cuerpo humano.