Los padres son mucho más atentos con sus hijas que con sus hijos, de acuerdo con un estudio que sugiere inconsciente sesgos de género puede dictar la forma en que los padres tratan a sus hijos.

En el estudio, que observó 48 horas de interacciones entre padres y niños pequeños, surgieron diferencias sorprendentes entre la manera en que los padres hablaban y jugaban con los niños en comparación con las niñas.

Los padres de hijas pasaron un 60% más de tiempo respondiendo atentamente, en comparación con los hijos. También pasaron cerca de cinco veces más tiempo cantando y silbando con las chicas y hablando más abiertamente sobre las emociones, incluyendo la tristeza.

Los padres de los hijos pasaron cerca de tres veces más tiempo cada día dedicados al juego rudo, y usaron más lenguaje “relacionado con el logro”, incluyendo palabras como “orgulloso”, “ganador” o “mejor”.

Jennifer Mascaro, profesora asistente de medicina familiar y preventiva en la Universidad Emory de Atlanta, quien dirigió el trabajo, dijo: “Debemos ser conscientes de cómo las nociones inconscientes de género pueden jugar en la forma en que tratamos incluso a los niños muy pequeños”.

“La pregunta es siempre cuán significativas son esas diferencias”, dijo Mascaro. “Es algo realmente difícil de entender. Tan pronto como llegan al mundo, forman parte de una sociedad que tiene grandes sesgos en cómo interactuamos con hombres y mujeres “.

Estudiar la cuestión científicamente también ha resultado problemático, ya que los padres son a menudo reacios a admitir que tratan a los niños de manera diferente, pueden no ser conscientes de ello y es probable que se comporten de manera diferente cuando se les monitorea en un laboratorio.

Un estudio realizado por científicos de la Universidad Bar Ilan y el Centro Médico Galilea de Israel reveló que tener buenos niveles de vitamina D reduce riesgo de muerte o enfermedad grave por covid-19. 

Este estudio retrospectivo examinó si existe una relación entre el nivel sérico de vitamina D y la gravedad y mortalidad de la enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2. 

"Entre los pacientes hospitalizados con covid-19, la deficiencia de vitamina D previa a la infección se asoció con un aumento de la gravedad y mortalidad de la enfermedad", concluyó la investigación publicada por Plos One. 

La vitamina D es reconocida con mayor frecuencia por su papel en la salud ósea, pero en un bajo estado esta sustancia se ha asociado con una serie de enfermedades autoinmunes, cardiovasculares e infecciosas debido a su papel como mediador inmunológico esencial, precisa el estudio. 

Los factores de riesgo epidemiológicos para la deficiencia de vitamina D incluyen una mayor pigmentación de la piel, baja exposición al sol, uso de ropa que cubre la piel y una dieta baja en pescado y productos lácteos. 

Los estudios han demostrado previamente que los hábitos sociales en grupos étnicos específicos y la preferencia por usar ropa larga al aire libre son factores de riesgo independientes de deficiencia de vitamina D, particularmente entre las mujeres. 

El estudio categorizó los niveles de vitamina D de los pacientes en: deficientes (por debajo de 50 nmol/L o 20 ng/ml), insuficientes (50 nmol/L a 75 nmol/L o 20-29,9 ng/ml), adecuados (75–99,75 nmol/L o 30–39,9 ng/mL) y altos normales (igual a o superiores a 187,5 nmol/L o 40 ng/ml). 

"Desde las primeras etapas de la pandemia de covid-19, establecer la deficiencia de vitamina D como factor de riesgo fue el objetivo de muchos investigadores. Fue objeto de mucho debate en el público en general y en múltiples revistas médicas", precisó el estudio. 

Los científicos precisaron que el estudio contribuye a un cuerpo de evidencia en continua evolución que sugiere que los antecedentes de deficiencia de vitamina D de un paciente es un factor de riesgo predictivo asociado con un peor curso clínico del covid-19 y la mortalidad. 

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Las personas que se acuestan tarde usan peores estrategias para regular sus emociones, según revela un estudio de la Universidad de Málaga que analiza los ritmos circadianos.

El profesor de la Facultad de Psicología de la Universidad de Málaga Juan Manuel Antúnez ha señalado que un importante porcentaje de la población padece "jet lag social", que ocurre cuando el reloj social y biológico no coinciden, como es el caso de los vespertinos.

El estudio analiza los ritmos circadianos -cambios físicos, mentales y conductuales que siguen un ciclo diario-, y que responden principalmente a la luz y la oscuridad en el ambiente de un organismo, y en concreto, la matutinidad-vespertinidad, que es una forma en que se manifiestan.

Estudios previos de este profesor ya habían demostrado que las personas vespertinas suelen tener más problemas psicológicos como trastornos del estado de ánimo, de la conducta alimentaria, psicóticos o alteraciones del sueño, entre otros, mientras que las matutinas tienden a mostrar mayores niveles de optimismo, resiliencia e inteligencia emocional.

Según el experto en personalidad de la UMA, la matutinidad-vespertinidad es un continuo bipolar en el que se puede clasificar todo el mundo.

Así, aquellos que se despiertan muy temprano, incluso los fines de semana cuando no tienen que madrugar, y que se acuestan pronto porque “se lo pide el cuerpo” son los que se encuentran más próximos al polo matutino.

En cambio, los vespertinos son todo lo contrario: suelen trasnochar, les cuesta madrugar y rinden mejor a últimas horas del día.

“Se estima que el 20 por ciento de la población es matutina, otro 20 por ciento, vespertina y el 60 por ciento restante, intermedia, es decir, los que se encuentran en el centro de los dos polos”, explica Antúnez.

En concreto, este último trabajo publicado en la revista Plos One, que ha contado con más de 3.000 participantes y se ha desarrollado de forma virtual, ha estudiado cómo esta tipología circadiana se relaciona con la regulación emocional, entendida como la capacidad para controlar las emociones.

Las personas matutinas hacían mayor uso de estrategias de reevaluación cognitiva –volver a valorar lo ocurrido a fin de modificar el significado y el impacto emocional de una situación determinada- que las vespertinas.

Estas últimas, a su vez, presentan un mayor uso de estrategias de supresión de la expresión, es decir, que tienden a reprimir la expresión facial asociada al sentimiento de emociones tanto positivas como negativas.

Este segundo tipo de estrategias, como destaca Antúnez, se encuentra estrechamente relacionado con problemas psicológicos, especialmente ansiedad y depresión.

El profesor ha detectado una diferencia por sexos, ya que "las mujeres utilizan más estrategias de reevaluación cognitiva que los hombres, que prefieren las estrategias de supresión”.

Asimismo, el investigador sostiene los vespertinos padecen ‘jet lag social’, que ocurre cuando el reloj social y el biológico no están sincronizados, ya que los horarios sociales tienden a ser matutinos.

Las personas vespertinas se encuentran "más fatigadas y en desventaja por dicho desajuste", lo que podría dar lugar a una mayor tendencia a poner en marcha estrategias de regulación emocional "menos eficaces, originando problemas psicológicos a tener en cuenta”, ha asegurado. 

Major League Baseball realizará sus primeros encuentros de temporada regular en la Ciudad de México en el nuevo estadio Alfredo Harp Helú durante la campaña 2020, anunciaron hoy MLB y la Asociación de Jugadores de Grandes Ligas (MLBPA). La serie de dos juegos entre los Diamondbacks de Arizona y los Padres de San Diego se jugará del 18 al 19 de abril.

Con esta serie del 2020 se disputarán los primeros juegos de MLB en el recién construido estadio Alfredo Harp Helú. El estadio se completó en marzo de 2019 y tiene una capacidad de 20,000 espectadores. Se encuentra en la sección de Ciudad Deportiva Magdalena Mixhuca de la Ciudad de México y es donde juega el equipo Diablos Rojos del México de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB). Banorte volverá a servir como patrocinador de la serie. La información sobre boletos para juegos individuales será anunciada en una fecha posterior.

"Los D-backs están comprometidos a mostrar lo mejor de nuestro juego al mundo y específicamente a través de México, donde tenemos miles de fieles seguidores", dijo Derrick Hall, Presidente y Director Ejecutivo de D-backs. "Como miembro del Comité Internacional de MLB, he visto de primera mano los increíbles esfuerzos realizados a nivel de la liga para ayudar crecer el deporte del béisbol mundial y nos sentimos honrados de ser seleccionados para jugar en la Ciudad de México la próxima temporada."
"Los Padres tienen el honor de ser parte de la primera serie de la temporada regular en la Ciudad de México en la historia de las Grandes Ligas", dijo el presidente de operaciones comerciales de los Padres, Erik Greupner. "También estamos entusiasmados de jugar en el hermoso y nuevo Estadio construido por propietario minoritario de los Padres Alfredo Harp Helú. Nuestras conexiones con México son profundas, con Alfredo siendo copropietario de los Padres y nuestra base de fanáticos binacionales que se extiende hasta Baja California y en el país. Estamos encantados de competir en la capital de México y mostrar a nuestros jugadores a escala mundial". 

Los Padres de San Diego hoy anunciaron a los miembros del cuerpo técnico del manejador Jayce Tingler para la temporada del 2020. Este año se unen al grupo Larry Rothschild como coach de pitcheo, Bobby Dickerson como coach de banca, Wayne Kirby como coach de primera base y Ben Fritz como coach del bullpen. Skip Schumaker ha sido ascendido a la posición de manejador asociado después de ocupar el rol de coach de primera base durante las últimas dos temporadas. Regresando al equipo como coach de bateo será Damion Easley, quien fue el coach de bateo asistente en el 2019. Rod Barajas, el coach de banca y manejador interino de los Padres en el 2019, será el coach de receptores y control de calidad en el 2020 y Glenn Hoffman también regresa como coach de tercera base.

                Rothschild, de 65 años de edad, se une a la organización de los Padres para su temporada 24 como coach de pitcheo en Grandes Ligas y su año 46 en el béisbol profesional como jugador, coach o manejador. Rothschild estuvo con los Yankees de Nueva York los últimos nueve años (2011-19) sirviendo como coach de pitcheo. Durante su tiempo en Nueva York, los Yankees fueron primeros en la Liga Americana en las categorías de juegos ganados (826) y ponches (12,364), incluyendo un récord de la franquicia con 1,634 ponches en el 2018, la tercera marca más alta en una temporada en la historia de Grandes Ligas. Antes de estar en Nueva York, duró nueve temporadas (2002-10) como el coach de pitcheo de los Cachorros de Chicago, en donde los Cachorros fueron primeros en las Grandes Ligas en ponches en cada de sus primeras siete temporadas. El nativo de Chicago, Ill. fue el primer manejador en la historia de los Devil Rays de Tampa Bay (1998-2001) y ganó dos Serias Mundiales como un coach con los Rojos de Cincinnati (1990) y los Marlins de Florida (1997). Originalmente firmado por los Rojos como un agente libre en 1975, Rothschild lanzó 11 temporadas (1975-1985) entre las organizaciones de los Rojos y Tigres de Detroit con una marca de 66-46 con 50 salvamentos y una efectividad de 3.96 en 387 apariciones en ligas menores (80 juegos iniciados). Hizo siete apariciones en Grandes Ligas como relevista con los Tigres en 1981 y 1982 con una efectividad de 5.40.

Dickerson, de 53 años de edad, entra a su primera temporada con la organización de los Padres como coach de banca después de ser el coach de jugadores de cuadro en el 2019 con los Phillies de Filadelfia. Duró seis temporadas (2013-18) como coach de tercera base para los Orioles de Baltimore después de tres años (2010-12) en el departamento de desarrollo de jugadores del club como coordinador de jugadores de cuadro y manejador interino para Norfolk (AAA). El nativo de Laurel, Miss. trabajó ocho años en el sistema de ligas menores de los Cachorros de Chicago como el manejador de Iowa (AAA, 2006 y 2009), coordinador de jugadores de cuadro y toques de bola en ligas menores (2006-08) y manejador para West Tennessee (AA, 2002-05). Dickerson estuvo en el departamento de desarrollo de jugadores con los Diamantes de Arizona por cuatro años como instructor de jugadores de cuadro en ligas menores (2001), manejador para El Paso (AA, 2000), coordinador de ligas menores (1999) y coordinador de jugadores de cuadro (1998). Empezó su carrera como coach en el departamento de desarrollo de jugadores de Baltimore, trabajando sus primeros cinco años como un jugador/coach para Rochester (AAA, 1993), instructor de jugadores de cuadro en ligas menores (1994-97) y manejador para Bluefield (Liga Novato, 1996-97). También fue manejador de las Águilas de Mexicali de la Liga Mexicana del Pacifico y el club Cibao de la Liga Invernal en la Republica Dominicana después de la temporada del 2016 y Mesa en el 2002 en la Liga Otoño de Arizona. Originalmente seleccionado por los Yankees de Nueva York en la ronda 23 del sorteo de 1987, jugó siete temporadas en ligas menores como un jugador de cuadro con los Yankees y Orioles.

Kirby, de 55 años de edad, se une a los Padres como coach de primera base después de estar las últimas ocho temporadas (2011-18) con Baltimore en la misma posición. Además de sus responsabilidades como coach de primera base, Kirby también tendrá un enfoque en instrucción de los jardineros y corredores en base. Sirvió cinco temporadas (2006-10) con los Rangers como el coordinador de jardineros y corredores en base y también como coach de bateo en el sistema de liga menores de los Indios de Cleveland por cuatro temporadas (2002-05). Originalmente seleccionado por los Dodgers de Los Angeles en la ronda 13 del sorteo de 1983, Kirby jugó 18 años profesionalmente, incluyendo partes de seis temporadas en Grandes Ligas con los Indios de Cleveland (1991-96), Dodgers (1996-97) y los Mets de Nueva York (1998). El ex jardinero bateó .252 (302 por 1198) con 51 dobles, nueve triples, 14 cuadrangulares, 119 carreras impulsadas y 183 carreras anotadas en 516 juegos en su carrera. El nativo de Williamsburg, Va. fue primero en asistencias de jardineros en el 1993.

Fritz, de 38 años de edad, entra a su sexta temporada en la organización de los Padres y su primera como coach de bullpen en Grandes Ligas. Sirvió como el coordinador de rehabilitación en Arizona sobre las últimas dos temporadas (2018-19), manejador por clase-A Tri-City en el 2017 y en el 2015-16, estuvo con el equipo de nivel novatos de la organización en Peoria. Fue seleccionado en la primera ronda (número 30) del sorteo del 2002 por los Atléticos de Oakland y lanzó por siete temporadas profesionalmente entre las organizaciones de los A’s (2002-07) y los Tigres de Detroit (2009), junto con tres temporadas con los Barnstormers de Lancaster de la Liga Independiente Atlantic (2008-10). El lanzador derecho tuvo una marca de 45-61 con una efectividad de 4.75 en 192 juegos en ligas menores (187 iniciados). El nativo de San Jose, Calif. jugó en Fresno State durante la universidad donde fue nombrado el Lanzador del Año en la Conferencia Atlética del Oeste y un miembro del segundo equipo de “All-American” en el 2001.

Schumaker, de 39 años de edad, regresa para su tercera temporada en el cuerpo técnico de Grandes Ligas, su quinta con la organización de los Padres y primera como manejador asociado. Sirvió como un asistente al departamento de operaciones de beisbol y el desarrollo de jugadores desde que se retiró y se unió a las oficinas de San Diego en el 2016. El ex jardinero y segunda base jugó 11 temporadas en Grandes Ligas con los Cardenales de San Luis (2005-12), Dodgers de Los Angeles (2013) y Rojos de Cincinnati (2014-15). Un campeón de la Serie Mundial en el 2006 y 2011 con los Cardenales, Schumaker bateó .278 (905-3252) con 169 dobles, 13 triples, 28 cuadrangulares, 284 carreras impulsadas y 416 carreras anotadas en 1,149 juegos.

Easley, de 50 años de edad, entra a su novena temporada con la organización de los Padres y su segunda como coach en el cuerpo técnico de Grandes Ligas y primera como coach de bateo. Duró las últimas siete temporadas con los Padres en Peoria, Ariz., en la posición de coach de bateo de rehabilitación desde el 2015-18. El ex jugador de cuadro y miembro de Equipo de Estrellas bateó .253 (5484-1386) sobre partes de 17 temporadas en Grandes Ligas con 287 dobles, 27 triples, 163 cuadrangulares, 684 carreras impulsadas, 735 carreras anotadas y 88 bases robadas en 402 juegos entre los Angels de California (1992-96), Tigres de Detroit (1996-2002), Rays de Tampa Bay (2003), Marlins de Florida (2004-05), Diamantes de Arizona (2006) y Mets de Nueva York (2007-08). Easley originalmente fue seleccionado en la ronda número 30 por los Angels en el sorteo del 1988. El nativo de Nueva York, NY se graduó de Lakewood (CA) High School en el 1987 y jugó beisbol universitario en Long Beach (CA) del 1987-88. Fue nombrado a los equipos de “All-South Community College Conference” y “All-California” y fue nombrado el Jugador Más Valioso de su equipo.

Barajas, de 44 años de edad, entra a su séptima temporada con la organización de los Padres, su segunda como coach para el club de Grandes Ligas y primera como coach de receptores y control de calidad. Sirvió como manejador de Triple-A El Paso desde el 2016-18, donde dirigió a los Chihuahuas a su tercer título consecutivo de la división en la Liga de la Costa del Pacífico y la mejor marca (82-57) en la historia del equipo en el 2018. Antes de ser el manejador en El Paso, Barajas fue el coach de bateo para Clase-A Lake Elsinore en el 2015 antes de ser nombrado como manejador en Doble-A San Antonio en junio de ese año. Empezó la temporada del 2014 como manejador del equipo a nivel novatos en Peoria, Ariz., y acabó la temporada en Lake Elsinore como coach de bateo. Barajas llegó a los Padres después de una carrera como jugador de 17 años, incluyendo partes de 14 temporadas en Grandes Ligas con los Diamantes de Arizona (1999-2003), Rangers de Texas (2004-06), Phillies de Philadelphia (2007), Azulejos de Toronto (2008-09), Mets de Nueva York (2010), Dodgers de Los Angeles (2010-11) y Piratas de Pittsburgh (2012). El ex receptor bateó .235 (3460-812) con 187 dobles, un triple, 136 cuadrangulares, 480 carreras impulsadas y 396 carreras anotadas en 1,114 juegos en su carrera. Originalmente firmado por Arizona como un agente libre de ligas menores en 1996, hizo su debut de Grandes Ligas para los Diamantes en el 1999 y fue un miembro del equipo campeón de la Seria Mundial del 2001. Un nativo de Ontario, Calif., Barajas jugó para México en el Clásico Mundial del 2009 y como miembro de los Azulejos, fue nominado como representante del equipo para el premio de “Heart and Hustle” del 2009.

Hoffman, de 61 años de edad, regresa para su temporada 15 como el coach de tercera base de los Padres y su temporada 22 como coach en Grandes Ligas. La temporada del 2020 será su 45º en el béisbol profesional como jugador, coach o manejador. Hoffman se unió a los Padres en el 2006 después de servir como coach de tercera base para los Dodgers desde 1999-2005. Fue nombrado manejador de los Dodgers el 21 de junio de la temporada del 1998 y dirigió al equipo a un record de 47-41 para cerrar la temporada. Originalmente seleccionado por Boston en la segunda ronda del sorteo del 1976, el ex jugador de cuadro jugo partes de nueve temporadas en Grandes Ligas con las Medias Rojas (1980-87), Dodgers (1987) y Angels de California (1989).

Adicionalmente, Ryan Flaherty, de 33 años de edad se une al cuerpo técnico como un scout avanzado/coach de desarrollo. También apoyando al cuerpo técnico serán Griffin Benedict, de 32 años de edad, regresando para su décima temporada como receptor de bullpen/instructor de Grandes Ligas, Keith Werman, de 30 años de edad, regresando para su tercera temporada como coordinador de desarrollo de Grandes Ligas y Peter Summerville, de 27 años de edad, regresando para su segunda temporada como receptor de bullpen/coach asistente.

Casi todos saben que los Padres buscan reforzar su rotación -- pero está por verse si en realidad podrán conseguir los servicios de Stephen Strasburg.

A plena vista, este movimiento definitivamente tiene sentido. Aparte de que los Frailes buscan agregar un abridor para encabezar la rotación, Strasburg es oriundo de San Diego y también asistió a la Universidad Estatal de San Diego antes de que fuera elegido por los Nacionales en el draft del 2009.

También se espera que los Padres aumenten su presupuesto en esta temporada muerta, aunque Joel Sherman de MLB Network dijo que le sorprendería si el club esté dispuesto a invertir en grande para adquirir a Strasburg.

Aunque Sherman expresa algo de duda, vale señalar que los Frailes realizaron contrataciones de impacto en los últimos dos inviernos -- Eric Hosmer (ocho años, US$144 millones) antes de la campaña del 2018 y Manny Machado (10 años, US$300 millones) en la temporada muerta pasada.