¿Enviarías una factura a los invitados a un evento para que la paguen por no ir pese a que te dijeron que sí? o imagina que te llega, ¿la pagarías aún cuando no fuiste por diversos motivos? Esas dos preguntas son las que lideran el debate en internet tras la decisión de una pareja en Estados Unidos de mandar esa solicitud a todos sus cercanos que no llegaron a su boda cuando les avisaron que estarían presentes.
The New York Post revela que Deedra McGee, de 43 años, y Doug Simmons, de 44 años, decidieron enviar la factura por el pago de 240 dólares (poco más de 4 mil 800 pesos) a todos sus cercanos que les prometieron ir a su boda, la cual se realizó en Royalton Negril Resort & Spa, en Jamaica, pero que luego no llegaron.
Uno de los documentos de pago comenzó a circular en redes sociales, luego de ser publicado originalmente en el Facebook del hombre, ahí se lee que "esta factura se le está enviando porque confirmó asiento (s) en la recepción de la boda durante el recuento final".
"Debido a que no nos llamó ni nos dio el aviso adecuado de que no asistiría, esta cantidad es lo que nos debe por pagar su (s) asiento (s) por adelantado. Puede pagar a través de Zelle o PayPal.
Comuníquese con nosotros y díganos qué método de pago le conviene. ¡Gracias!", culmina la nota. El debate en internet se hizo acalorado, algunos apoyaron a la pareja y otros encontraban escandalosa su actitud, pero más allá de las palabras de quienes no conocen a los novios, la gran pregunta es saber qué va a pasar con quienes les llegó la factura. ¿Pagarán o harán caso omiso? y también está saber si seguirán siendo amigos, aún cuando decidan qué hacer.
El medio estadunidense habló precisamente con Doug, quién confirmó el envío de la factura, afirmando estar molesto por la actitud de prácticamente la mayoría de quienes no fueron a la boda que tenía reservado 100 asientos.
"Fueron cuatro veces en que preguntamos: '¿Estás disponible para venir? ¿Puedes asistir?'.
Tuvimos que pagar por adelantado por Jamaica; esta era una boda de destino", dijo el hombre, que es dueño de un restaurante China Town.
Pese a las preguntas que dice Doug haber realizado, todos le dijeron que sí iban a ir a la boda que aparentemente tuvo un costo por persona de 120 dólares (poco más de 2 mil 400 pesos). "Nadie me dijo ni me envió un mensaje de texto, 'Oye, no podemos asistir'. Eso es todo lo que estaba preguntando. Si me dices que no puedes asistir, lo entendería, pero no me digas nada, pero luego me dejas pagar por ti y tus demás. Cuatro personas se convirtieron en ocho personas. Me lo tomé muy personal", dijo el hombre. Según el medio, hasta ahora el nuevo matrimonio no ha definido qué pasará con quienes no paguen la factura, pero muy probablemente es que la definición de amistad va a cambiar para muchos de los involucrados.