León, Guanajuato, ya no solo es el destino predilecto para comprar zapatos de piel. En los últimos años ha escalado en los índices de pobreza y violencias hasta alcanzar los primeros lugares: es el municipio con el mayor número de pobres y el tercero con más homicidios dolosos.
No es el único caso, al menos Tijuana, Baja California, y Ciudad Juárez, Chihuahua, comparten estas características de marginación y violencia. Los tres están en los primeros lugares en estos rubros, aunque especialistas enfatizan que no hay por sí misma una relación entre ambos.
“No hay evidencia de que los municipios pobres del país sean los municipios más violentos, ni siquiera existe una relación entre las entidades más pobres del país y las más violentas”, afirma Francisco Rivas, director general del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC).
De acuerdo con un reporte de la Secretaría de Seguridad, el municipio fronterizo ocupa el primer lugar en homicidios y el octavo en pobreza con 453,508 habitantes en esta condición, mientras que Ciudad Juárez es el tercero en inseguridad y el 13 en número de pobres.
El ranking del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) de los municipios con más niveles de pobreza en el país ubica a León en el primer sitio con 816,934 habitantes en esta situación. Le sigue Ecatepec, en el Estado de México, con 786,391; Iztapalapa, en la Ciudad de México, con 772,584; Puebla, en el mismo estado, con 680,945, y Nezahualcóyotl, también en el Edomex, con 523,289.
Pero también están los centros turísticos de Acapulco de Juárez (Guerrero) y Benito Juárez (Quintana Roo), con 394,861 y 323,435 habitantes en esta condición. En el caso del primero, es también el municipio con más habitantes en pobreza extrema y el quinto de las localidades con más homicidios dolosos.
En una entrevista con el Correo Fronterizo, Jesús Pérez Caballero, Investigador Cátedra del Departamento de Estudios Culturales de El Colegio de la Frontera Norte, afirmó que no existe una correlación entre violencia y pobreza, pues los estados más pobres de México o los países más pobres del mundo no son los más violentos.
El reporte del Coneval registró que los municipios con mayor proporción, respecto a su población, de personas en situación de pobreza están en Oaxaca y Chiapas, los cuales no cuentan con los municipios con más homicidios.
El investigador señaló que sí hay tres variantes con las que se puede pensar en una correlación entre violencia y pobreza:
Violencia y desigualdad.
Violencia y falta de instituciones
Cambios abruptos en la posición social del individuo
No obstante, comentó que aunque estas impactan en la percepción del individuo y en algunos lugares donde se combinan estos factores y además hay condiciones de precarización muy grandes, los grupos del crimen organizado encuentran las condiciones para reclutar personas a cambio de dinero fácil, pero no es correlativo.
En esto coincide Francisco Rivas, quien señala que si solo la pobreza fuera el factor que induce a la violencia entonces tendríamos el problema que las zonas más pobres del país, como Chiapas, algunos municipios de Oaxaca, Guerrero, incluso Estado de México y solo hay una relación clara entre violencia y marginación donde hay presencia previa de delincuencia organizada.
“La marginación tiene un rol importante en la mayor probabilidad que exista incidencia delictiva y violencia, sí, pero no es la marginación en sí misma sino la marginación en un contexto donde hay la presencia de delincuencia organizada, la debilidad institucional, la poca presencia del Estado”, dice.
Apoyo a municipios
La pobreza en algunos municipios destaca porque se trata de localidades urbanas y cercanas a grandes metrópolis, donde no necesariamente prevalece la falta de carencias sociales que impactan en estos niveles.
Por ejemplo, las alcaldías de Iztapalapa y Gustavo A. Madero, en la Ciudad de México, ocupan el lugar 3 y 12 en cuanto al número de personas en situación de pobreza y ambos forman parte de los 50 municipios de mayor incidencia delictiva, al encontrarse en el lugar 24 y 35 respectivamente. También aparece Cuauhtémoc en el lugar 47 de la lista.
Sobre ello, la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum ha planteado que su objetivo es sacar a estas alcaldías de la lista de los más violentos.
Sheinbaum argumentó la relación de la violencia con la población. En el caso de Iztapalapa dijo que su incidencia delictiva es alta debido que es la demarcación más poblada con 1.8 millones de habitantes, seguida de Gustavo A. Madero con 1.1 millones, mientras Cuauhtémoc está hasta el quinto lugar en población con 545,000 habitantes, aunque en este caso señaló que llegan más de cuatro millones de personas diariamente.
La pobreza urbana 'cultiva' la violencia El aumento de carencias en las ciudades fomenta resentimientos sociales y delincuencia, según el gobierno de México y académicos
Por su parte, la semana pasada la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, anunció que se destinarán 2,700 millones de pesos adicionales a fondo de seguridad, a los municipios con mayor incidencia delictiva para el próximo año.
Desde julio, el presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que la atención a los 50 municipios con mayor cantidad de homicidios, que concentran el 47.8% de los delitos, no sólo será con presencia de la Guardia Nacional sino que la estrategia va acompañada de desarrollo social y bienestar.
“Es un programa integral para atender más a los jóvenes y combatir la pobreza y la marginación, con la finalidad de fortalecer valores culturales, morales, espirituales y también la presencia de la policía. Es un plan especial con este propósito”, señaló.