Ángeles Rodríguez llegó hace dos meses a la ciudad de Tijuana para buscar asilo en Estados Unidos en compañía de su familia, quienes hasta el momento se encuentran en el campamento El Chaparral.

La señora Ángeles, originaria de Nicaragua huyó de su país por la ola de violencia y mientras espera el apoyo para cruzar la frontera ha tenido que buscar la manera de salir adelante.

"Pues tengo que buscar como vender un poco para poderme substentar porque si me espero a las cosas que nos regalan aquí me muero de hambre, entonces prefiero vender algo aunque me gane 100 pesos para poder sobrevivir en lo que me dan el asilo" expresó 

La migrante tuvo que colocar unas cajas de verduras, frutas, dulces y bebidas sobre la banqueta frente a su casa de acampar.

Señaló que en Tijuana ha vivido días muy difíciles pues son 8 integrantes en su familia y conseguirles alimentos no ha sido fácil.

Pese a las complicaciones asegura que no regresará a su país de origen. 

"En Nicaragua hay mucha violencia, nos tienen sin trabajo, se están llevando a todas las mujeres y niños, estoy huyendo porque el gobierno nos amenaza de muerte y la carencia que cada día tenemos allá es muy difícil, aquí por lo menos comemos y allá no" lamentó

El pastor Alberto Rivera, director del albergue Ágape, se manifestó esta tarde junto a un grupo de migrantes en las instalaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), argumentando que las autoridades violentaron los derechos de las personas durante el desalojo de El Chaparral la madrugada del domingo.

El padre aseguró que las autoridades de seguridad solamente le permitieron a las personas agarrar tres objetos de sus casas de campaña ya que no estaban dejando que se llevaran todas sus pertenencias.

Rivera dijo que previamente sostuvo una reunión con autoridades de gobierno para buscar la forma de que las personas dejaran las instalaciones del puerto fronterizo.

Los migrantes que se manifestaron llevaban consigo pancartas con distintas leyendas exigiendo justicia y ser tratados con dignidad.

Luego de que la madrugada de ayer el ayuntamiento desalojó a las 381 personas migrantes que aún mantenían el campamento en la explanada del puerto fronterizo de El Chaparral, personal del municipio comenzó con la rehabilitación de la zona.

Por la tarde ayer el personal del ayuntamiento comenzó con los trabajos de remoción de objetos que mantenían los migrantes, además de limpieza del lugar y esta mañana comenzaron a pintar las señaléticas de tránsito y en general de la zona. 

Las autoridades todavía no han retirado el cerco de malla ciclónica con la que delimitaban el campamento. 

Mientras que elementos de la Policía Municipal, la Guardia Nacional y de la Secretaría de Seguridad Estatal resguardan el lugar para evitar que se realicen concentraciones de personas nuevamente en el lugar. 

Debido a que siguen llegando personas migrantes, sobre todo del interior del país, para preguntar sobre los procesos de asilo. 

De forma extraoficial se mencionó que probablemente la próxima semana sea reabierto el cruce peatonal, sin embargo esta versión no ha sido confirmada por las autoridades.

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Con el desalojo del campamento migrante de El Chaparral, los comerciantes establecidos esperan que la economía de la zona se reactive debido que durante casi un año sus ventas se vieron afectadas debido a la disminución de transeúntes. 

El señor Edgar, quién administra un local de venta de boletos de camión a Estados Unidos y a Baja California, comentó que en este lapso de tiempo se vio en la necesidad de diversificar su negocio debido a que quedó en medio del campamento migrante. 

Mencionó que tras la disminución de la venta de boletos, comenzó a ofrecer distintos servicios enfocados en las necesidades de las personas migrantes que estuvieron viviendo cerca de un año en la explanada del puerto fronterizo de El Chaparral. 

Reconoció que la demanda por parte de las personas migrantes era buena debido a que les cargaba el celular, les permitía ingresar a los sanitarios, además de que les vendía algunas golosinas. 

Los locatarios esperan que con la reapertura de las puertas del puerto fronterizo el flujo de personas mejore.

La Alcaldesa de Tijuana, Montserrat Caballero Ramírez, dijo que desde hace semanas se había planeado retirar a los migrantes de la garita El Chaparral.

"Hemos venido paulatinamente, ya sabían que era una cuestión que se iba a dar. Toda la semana lo hemos planeado para que fuera lo menos sorpresivo y sobretodo teniendo el aval con derechos humanos", expresó Caballero.

Señaló que una vez que se retire el campamento en su totalidad permanecerán elementos de la Guardia Nacional. 

El gobierno municipal respetará la decisión de los 381 migrantes, si desean regresar a su lugar de origen se les apoyará con el traslado y a quienes deseen esperar su asilo político les brindarán la atención correspondiente a través de los albergues.

"Algunos han manifestado que tienen a donde trasladarse les estamos dando el apoyo para llevarlos al lugar que ellos están solicitando. Una familia se trasladó a Rosarito, pidió que querían irse allá y estamos respetando la decisión de ellos pero estamos garantizando el espacio para todos", puntualizó el Secretario General de Gobierno de Baja California, Catalino Zavala Márquez.

A pesar de la hora y forma en que fueron retirados esta madrugada los 381 migrantes en el campamento El Chaparral en la ciudad de Tijuana, la Alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez, aseguró que no se utilizó la fuerza y los elementos de seguridad no estaban armados.

"Por si teníamos un altercado todos, todos los elementos vienen sin armas en un movimiento pacífico, la gente tomó sus cosas y hubo personas que se empezaron a subir por su voluntad sin utilizar la fuerza pública a los camiones", detalló Caballero.

Las familias migrantes fueron trasladadas al Centro Integrador del Migrante y Santuario Migrante que proporcionó el estado y la federación.

Por su parte, el Secretario General de Gobierno de Baja California, Catalino Zavala Márquez, dijo que previo al desalojo se reviso el campamento migrante con Protección Civil, Derechos Humanos y autoridades estadounidenses.

"Van a contar con el apoyo y asesoría legal que tiene que ver con los trámites de asilo político y van a estar acompañados de su abogado y organizaciones que les han brindado apoyo", dijo Zavala.

Por último, señalaron que no se ha determinado a partir de cuando estará funcionando la garita El Chaparral.