Diez tipos de aceites comestibles, ¿cuál es mejor?
En la preparación de cualquier alimento se deben considerar todos los aspectos para su elaboración, no sólo son importantes los ingredientes sino también con qué aceite se cocinarán, ya que a veces éstos no son tan nutritivos para la salud.
Los aceites comestibles son un ingrediente fundamental para la preparación y cocción de la mayoría de los alimentos, pero unos son saludables y otros pueden hacer daño.
Jamás se debe reutilizar el aceite con el que ya se cocinó. De acuerdo con la "Revista del consumidor", "en el momento que el aceite comienza a humear, debe retirarse del fuego porque se está descomponiendo y empiezan a generarse compuestos tóxicos que pueden perjudicar gravemente tu salud".
A continuación se presenta cuáles son los aceites comestibles y sus beneficios:
1. Aceite de oliva: existen diversos grados de éste como virgen, extravirgen, crudo y refinado, aunque se recomienda el consumo de los dos primeros debido a que son extraídos del fruto y no se añade ninguna sustancia química, por ende, el consumirlo beneficia el sistema cardiovascular por las grasas saludables que posee, además sirve como analgésico y antiinflamatorio.
2. Aceite de canola: es recomendable utilizarlo en la preparación de los alimentos porque no contiene grasas saturadas, lo cual no repercute en el colesterol. Además contiene Omega-3, que fortalece a los huesos y a las articulaciones.
3. Aceite de algodón: se obtiene de la planta de algodón y se encuentra con frecuencia en las margarinas, este aceite comestible contiene ácido palmítico, aunque no debes utilizarlo muy seguido ya que eleva el nivel de colesterol, su uso tiene que ser moderado.
4. Aceite de maíz: se origina del germen del maíz y es un aceite poliinsaturado y rico en vitamina E, la cual sirve como antioxidante y regula el sistema nervioso, aunque igual debes consumirlo con moderación.
5. Aceite de soya: es un poliinsaturado que posee Omega 3 y 6, disminuye la presión arterial y evita enfermedades cardíacas.
6. Aceite de girasol: contiene ácidos grasos poliinsaturados como el ácido linoleico y ácido linolénico, por lo que disminuye el nivel de triglicéridos; además por su contenido de Omega-6 beneficia la salud del hígado, ya que elimina las grasas y disminuye las posibilidades de padecer enfermedades degenerativas.
7. Aceite de cártamo: es de los aceites comestibles con mayor contenido de ácido linoleico; disminuye el nivel de azúcar en la sangre, favorece el funcionamiento del sistema cardiovascular e inmunológico y baja el nivel de colesterol dañino de la sangre.
8. Aceite de linaza: se obtiene de la semilla de lino, es rico en Omega 3 y 6 por lo cual beneficia la salud cardiovascular, mejora el funcionamiento intestinal y regula la presión sanguínea.
9. Aceite de sésamo: posee diversos ácidos grasos como Omega 6 y 9, también contiene lecitina, fibra y aminoácidos. Estimula la depuración del organismo, el funcionamiento intestinal y favorece la actividad mental.
10. Aceite de cacahuate: es uno de los aceites que también contiene la mayoría de los ácidos grasos, estimula el metabolismo y disminuye el nivel de colesterol en la sangre evitando padecer alguna enfermedad cardiovascular.
El usar aceites es necesario para la preparación de los alimentos, no obstante, se debe considerar el uso de cada uno. Se puede utilizar el que más convenga, pero no hay que hacerlo de manera excesiva porque en vez de favorecer el organismo puede actuar de manera contraria.